El Beagle en el coche

Los Beagles en el coche no suelen ser muy problemáticos.
Es obligatorio llevar al perro atado, encerrado, o separado del conductor.
La solución mas eficaz para que un Beagle no moleste al conductor es llevarle en un transportín, aunque también se puede llevar al perro con las rejas en los asientos de atrás y el perro en el maletero suelto, otra opción es llevar una correa atrás y atarla a un cabecero por un extremo y al perro por el otro extremo, una forma muy segura para el perro es comprar una correa que se ata al perro y se encaja en el hueco del cinturón de seguridad del coche aunque si escoges esta opción el perro tendrá que ir atado a un arnés para mayor seguridad.

También puede ser que tu perro se maree en el coche, para ello consulta a tu veterinario, si solo se marea en viajes largos tendrás que parar a que el perro descanse y tendrás que tener cuidado con lo que come el perro antes de salir de viaje.
Hay muchos perros que no se marean en el coche, sino que se ponen muy nerviosos al entrar y al cabo de un tiempo le cogerán miedo al coche, para ello lo mejor es tratar al perro, enseñándole a que el transportín, jaula o correa no es malo.

Transportín:
Para tratar el miedo a subir en un coche con transportín tendrás que bajar el transportín del coche y meterle premios al perro en el transportín para que él vea que es bueno estar en él, para esta practica utilizaremos el clicker y los premios y lo que haremos será: abrir la puerta del transportín, meter dos premios dentro, dejar al perro que entre, clickar y darle otro premio al perro cuando esté dentro del transportín.

Jaula:
La jaula es el mejor sitio para el perro durante un trayecto corto, puesto que en un trayecto largo llevamos equipaje en el maletero y no quedará sitio para el perro.
La jaula se entrena igual que el transportín.

La correa o el cinturón:
Con la correa o cinturón lo que haremos será atar al perro en el coche y darle premios mientras está tranquilo y relajado, si está asustado o nervioso trataremos de calmarle, lo que tenemos que hacer es:

Subir al perro al coche, atarle al cinturón o correa, calmarle, cuando esté calmado clickar y darle dos premios sin excitarlo, solo clickaremos y le daremos el premio, no le diremos nada, durante diez minutos estaremos dándole premios siempre que esté tranquilo, de esta forma haremos que el perro esté tranquilo durante el trayecto y siempre al finalizar un viaje, le sacaremos y le daremos dos premios.